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Abrir un negocio que trabaje sola y que gane dinero. Ser un buen trabajador es muy bueno pero si se trabaja en la empresa que es de nuestra propiedad, es mucho mejor. Ahora ¿Qué pasaría si la empresa trabaja sola, me refiero a que yo no tenga que ver en ella? o sea que yo no sea un trabajador inclusive siendo un gerente o un alto ejecutivo sino un inversionista, pues lo que pasaría es que dejaría de ser un trabajo y pasaría a ser un negocio.
Se dice que un negocio es rentable cuando cubre todos los gastos y queda un porcentaje de utilidad, claro que para que represente una verdadera rentabilidad tiene que pasar por un proceso y eso, dura un tiempo. Hay casos que pasan años en sostener una empresa, hasta que le llega el boom de la abundancia y todo va para arriba, generalmente muchos no esperan tanto tiempo. Desde que tengo uso de razón, sé que por costumbre se da tres meses para saber si resulta o no.
El tiempo para muchos es como el oro y no pueden darse el lujo de perderlo y mucho más, si son poseedores de fortunas en las cuales invierten para ganar y ya. En otros medios no sucede así por el mismo hecho de hacer una inversión, que en la mayoría de los casos es con cierta cantidad de dinero que a veces no cubre el total de la inversión.
Abrir un negocio que trabaje solo
Cuando sucede eso, están propensos a fracasar por no tener dinero de respaldo y cómo tal, se someten al tiempo de espera que es de tres meses pero, en el tiempo que transcurre no ha sucedido lo que se esperaban deciden continuar, por otros tres meses más.
Después que pasa un buen tiempo, empiezan a darse cuenta hasta que se convencen que se equivocaron. Mal tiempo para darse entender puesto que no cuentan con capital porque ya lo agotaron todo en la espera. Un compañero de estudios que a pesar de que tenía un título académico en Ingeniería, hasta el momento que conversamos tenía 5 empresas y todos negocios en firme, la pregunta que le hice ¿Cómo puedes atender 5 empresas y estás aquí estudiando conmigo? Pues la respuesta fue muy lógica, me dijo que eran negocios y en los negocios él no mete mano.
Muy sabio ya que él no trabajaba en ninguna de ellas, ellas trabajaban para él. Algo que me llamó la atención, por cada empresa o negocio rentable, él ya había puesto otros que no funcionaron, es decir, él no esperaba los tres meses de inicio, porque cuando el negocio es rentable desde las primeras semanas ya se ve y para que esperar tres meses, si por cada uno es perdida.
Todo negocio o trabajo es rentable si se lo inicia con capital seguro, ganas de ganar sin tener expectativas, tener el conocimiento adecuado y cuando no, buscar en la fuente. Si contrata personal analícelo usted mismo y asegúrese de que vale la pena tenerlo como empleado.
El negocio no es para todos
Hace un tiempo escribí un libro de como iniciar un negocio o trabajo y ahí explico con detalle que hay que hacer para tener un trabajo o abrir un negocio. Hay que tomar en cuenta que no todas las personas están como para dirigir empresa o negocios, por esto, estas personas confunden la dirección con un simple empleo, esto quiere decir que la gente que interviene pasan a ser como si fueran amigos de barrio.
Esto origina que todo salga mal y el dinero que se invirtió se llega a perder, por si acaso, el tiempo de espera no sirve de nada porque si el negocio funciona, lo único que hará es darse más tiempo pero esto no elimina el riesgo de caerse.
En el sector en el que vivo, he visto como se abren supuestos negocios ya que lo que hacen es abrir un nuevo trabajo, de igual, unos mejores que otros pero no duran mucho tiempo, ¿Las razones? Unos equivocados y otros con la confusión entre clientes y amigos.
En conclusión, si quiere abrir un negocio debe aprender a diferenciar entre lo que quiere y un trabajo, por otro lado, debe estar preparado para no dejarse anclar en una idea ya que solo así, es que alguien se resiste e cerrar sabiendo que no funciona. Debe ser frío para tomar las decisiones correctas y no solo tener un plan de un solo proyecto, siempre debe tener varios por si todo funciona bien, ya que así puede seguir abriendo los negocios que quiera.
¿Tener un negocio rentable depende del estado emocional de la persona?
Tener un negocio rentable está estrechamente relacionado con el estado emocional de la persona que lo dirige. Las emociones influyen en la toma de decisiones, la capacidad para enfrentar retos y la forma en que se interactúa con los clientes, empleados y socios.
Si bien los aspectos técnicos y financieros son fundamentales, el éxito de un negocio también depende de la actitud y el enfoque emocional del emprendedor. Cuando alguien se encuentra en un estado emocional equilibrado, es más probable que tome decisiones claras y acertadas.
Esto se debe a que las emociones positivas como la confianza, la motivación y el entusiasmo fortalecen la capacidad para evaluar opciones, identificar oportunidades y asumir riesgos calculados. Además, un estado emocional saludable fomenta la resiliencia, permitiendo al emprendedor adaptarse a los desafíos y aprender de los errores en lugar de desanimarse.
El miedo, por otro lado, puede ser un factor limitante importante en el camino hacia un negocio rentable. Si tienes miedo, es posible que tomes decisiones basadas en la aversión al riesgo, lo que podría llevarte a evitar oportunidades valiosas.
El miedo también puede generar parálisis, haciendo que postergues acciones importantes por temor a cometer errores o enfrentar el fracaso. En lugar de avanzar con confianza, el miedo puede detenerte, afectando el crecimiento de tu negocio.
El miedo la inseguridad y la duda
El impacto del miedo no se limita a las decisiones financieras o estratégicas. También influye en la forma en que te comunicas con los demás. Si actúas con inseguridad o dudas, esto puede transmitir una imagen de falta de confianza a tus clientes o colaboradores.
Las personas tienden a responder de manera más positiva a quienes demuestran seguridad y convicción, por lo que el miedo puede dificultar la creación de relaciones sólidas y la construcción de una buena reputación en el mercado.
El miedo, sin embargo, no siempre es negativo. En pequeñas dosis, puede servir como una señal de advertencia que te impulse a prepararte mejor y a ser más cauteloso en tus decisiones. La clave está en gestionar ese miedo de manera que no te controle ni te impida actuar.
Identificar la fuente del miedo es el primer paso para enfrentarlo. ¿Tienes miedo de perder dinero? ¿De fracasar? ¿De no estar a la altura de las expectativas? Una vez que comprendes qué te está deteniendo, puedes trabajar en estrategias para superar esos temores.
La preparación es una herramienta poderosa contra el miedo. Cuanto más conocimiento y experiencia tengas en tu campo, más confianza sentirás al tomar decisiones. La investigación de mercado, el aprendizaje continuo y la planificación estratégica te ayudarán a sentirte más seguro en tu negocio.
La buena información es clave
Además, rodearte de mentores, colegas o asesores de confianza puede proporcionarte el apoyo emocional y técnico que necesitas para avanzar. Otro aspecto crucial es cambiar tu perspectiva sobre el fracaso. Muchas veces, el miedo surge de una percepción negativa de los errores, cuando en realidad estos son oportunidades de aprendizaje.
Cada desafío superado y cada lección aprendida te acerca más al éxito. En lugar de temer el fracaso, puedes verlo como una parte natural del proceso de crecimiento. Si el miedo persiste, trabajar en tu bienestar emocional puede marcar una gran diferencia.
Prácticas como la meditación, la respiración consciente o el ejercicio físico pueden ayudarte a reducir la ansiedad y mantener una mente más clara. También es útil desarrollar una mentalidad positiva, enfocándote en tus fortalezas y en los aspectos de tu negocio que están funcionando bien.
Esto no significa ignorar los problemas, sino abordarlos desde una posición de confianza y optimismo. La automotivación es otro elemento esencial. Recordar tus metas y visualizar el éxito que deseas alcanzar puede ayudarte a mantenerte enfocado, incluso en momentos de incertidumbre.
Tener un propósito claro te da la energía para superar el miedo y seguir avanzando, sabiendo que estás trabajando hacia algo significativo. El miedo puede ser especialmente perjudicial cuando lleva al aislamiento. Hablar con otras personas que han enfrentado desafíos similares puede ser reconfortante y esclarecedor.
En conclusión
Escuchar sus experiencias puede ayudarte a entender que no estás solo y que otros han superado situaciones similares. Compartir tus preocupaciones también puede aliviar la carga emocional y abrirte a nuevas perspectivas y soluciones.
En última instancia, un negocio rentable requiere tanto habilidades técnicas como una mentalidad emocional equilibrada. Aunque el miedo es una emoción natural, no debe ser el factor que dicte tus decisiones o limite tu potencial. Reconocer su presencia, entender sus causas y trabajar activamente para superarlo te permitirá avanzar con mayor confianza y eficacia.
Tener un negocio rentable no significa eliminar todas las emociones negativas, sino aprender a manejarlas de manera constructiva. Cuando logras esto, no solo fortaleces tu negocio, sino que también creces como persona. Cada paso que tomas hacia la superación del miedo es un paso hacia la realización de tus metas y el logro de un negocio exitoso.