Cuidado no te esfuerces es cansado y pesado

Cuidado no te esfuerces. El hombre es un animal de costumbres y que fácil se nos hace aprender algo que ni siquiera comprobamos si funciona o no. Cierto día me dijeron que para obtener algo hay que esforzarse, pero la verdad no es así.

Cuidado, no te esfuerces por qué esforzarse sólo le compete a los que buscan la carga pesada. ¿Cuándo esforzarse? Pues la única forma es cuando hace lo que no le gusta. Esfuérzate y no llegarás.

Cuidado no te esfuerces porque es cansado. Hace algunos meses, creo que siete u ocho leí un artículo en el cual decía que la única forma de llegar a un lugar, meta, éxito o cualquier objetivo que tenga en mente, tenía que esforzarse es más se mantenía que no hay otra forma en el mundo para poder lograr algo.Cuidado no te esfuerces

Me pareció un dato un poco fuera de mis entendimientos pero cada quién hace lo que puede. Desde luego que si ese dato del artículo quedaba ahí, pues no pasaba nada pero dicha persona escribió otro artículo, diciendo casi lo mismo pero con otro modelo de personas.

Bueno, lo pensé y dije «Esto no puede continuar, ¿Por qué las personas tienen que esforzarse para conseguir algo que supuestamente lo quieren?» Al menos yo no soy partícipe de nadar en contra de la corriente.

Cuidado no te esfuerces

Aunque una vez si lo hice pero fue en una competencia de natación y de verdad que es un verdadero esfuerzo, con esto doy un claro ejemplo de lo que es. Si usted es un deportista y me refiero a uno de competencia, es lógico que si usted no se esfuerza en el entrenamiento es seguro que perderá.

Esto lo digo por experiencia y no es agradable perder, ¿Acaso sabe lo que es entrenar a las 5:00 am y dar todo lo que su muy estimado cuerpo puede? Sólo lo entendería o me diera la razón si ha estado en entrenamiento de competencia.

Ahora si usted trabaja en algo que tiene que esforzarse significa que su trabajo es de fuerza, en este caso sería de estiba o cargador, pero en Internet, en oficina o cualquier trabajo que tenga que ver con negocios y que su mayor aportación sea su capacidad intelectual, ¿Por qué tiene que esforzarse?

Ahora me dirá, «Si pero es un trabajo y por lo tanto hay que hacer esfuerzo» entonces les pregunto ¿Me podrían decir si cuando usted se divierte acaso se esfuerza? ¿Cuándo va al cine, se esfuerza? ¿Cuándo sale de paseo también?

No señores y señoras, ahí no hay esfuerzo ¿Por qué? Pues la sencilla razón es porque nos gusta, sí, nos gusta y esa es clave de los trabajos. Si ustedes personas con una capacidad sorprendente de inteligencia, trabajan en algo que no les gusta ¿Por qué siguen ahí, haciendo esfuerzo por realmente nada?

Señores-as a mí me gusta mi trabajo, Soy Programador Neuro-lingüista y si de pronto me sale un paciente con un mal en su mente, puedo pasar horas de horas sin sentir cansancio, hambre, sed o cualquier molestia, incluso cuando trabajo con el Internet.

¿Qué pasa con los que si se cansan lo que hacen?

Cuando a una persona le gusta lo que hace, el trabajo o las actividades diarias se vuelven una fuente de satisfacción y energía. La pasión y el interés por lo que se realiza hacen que los esfuerzos no se sientan como una carga, y la persona se siente motivada a seguir adelante, incluso cuando se presentan desafíos.

Sin embargo, existen personas que se cansan de lo que hacen, incluso cuando el trabajo o la actividad en cuestión no es necesariamente agotadora ni insostenible. La pregunta es: ¿por qué algunas personas se sienten agotadas por lo que hacen y otras no? ¿Es una cuestión de vagancia o mediocridad, o existe algún otro factor que influye en este agotamiento?

Uno de los principales factores que puede causar que una persona se canse de lo que hace es la falta de pasión o interés genuino en la actividad. La pasión es un motor poderoso que impulsa a las personas a continuar, a innovar y a buscar mejoras, pero cuando la actividad carece de esa chispa, el proceso se vuelve monótono y aburrido.

A veces, una persona puede comenzar una actividad con entusiasmo, pero al pasar el tiempo, el interés disminuye y lo que antes era algo placentero se convierte en una obligación. La falta de conexión emocional con lo que se hace es una de las razones más comunes por las cuales las personas se sienten cansadas, incluso si la tarea en sí misma no debería ser tan demandante.

Sin pasión, el trabajo o la actividad pierden su propósito y se sienten como una carga, lo que lleva a la fatiga mental y emocional. El cansancio también puede ser el resultado de la sobrecarga de responsabilidades o expectativas.

La necesidad es obligación adquirida

Muchas veces, las personas se ven obligadas a realizar tareas que no les interesan, ya sea por presiones externas o por la necesidad de cumplir con expectativas ajenas. En estos casos, no se trata de una falta de motivación interna, sino de la obligación de cumplir con demandas externas que no están alineadas con los intereses o los deseos de la persona.

Esto puede generar un agotamiento extremo, ya que la persona no tiene control sobre lo que hace, y se ve obligada a realizar actividades que no le proporcionan satisfacción o sentido. La sensación de estar atrapado en una rutina forzada contribuye al cansancio, ya que no se tiene espacio para la creatividad ni para el desarrollo personal dentro de las tareas realizadas.

Otro factor importante que puede influir en el cansancio es la falta de un equilibrio adecuado entre trabajo y descanso. La sobrecarga de tareas, la falta de pausas y la presión constante por cumplir con plazos o metas puede llevar a la fatiga, incluso cuando la actividad en sí misma no es especialmente difícil o poco atractiva.

El agotamiento puede surgir cuando la persona se ve obligada a trabajar más allá de sus límites sin darle el espacio necesario para recuperarse. El cuerpo y la mente necesitan tiempo para descansar y recargar energías, y si esto no se les proporciona, el cansancio se acumula y afecta el rendimiento.

En algunos casos, este agotamiento puede generar una sensación de que el trabajo o la actividad en cuestión se ha vuelto insoportable, aunque en realidad es la falta de equilibrio lo que está causando el agotamiento. La falta de reconocimiento o recompensa también puede contribuir a que una persona se canse de lo que hace.

La falta de aprecio y la desmotivación

Aunque no siempre es necesario recibir recompensas externas, la falta de aprecio por los esfuerzos de una persona puede llevar a la desmotivación. Si una persona siente que su trabajo no es valorado, que sus esfuerzos no son reconocidos o que no hay ningún tipo de recompensa, ya sea en forma de reconocimiento o de resultados tangibles, es probable que pierda el entusiasmo por continuar.

Esto no se debe a vagancia o mediocridad, sino a una falta de satisfacción personal derivada de la ausencia de un retorno positivo por su esfuerzo. En este caso, el cansancio no proviene de la actividad en sí misma, sino de la falta de gratificación que se experimenta al realizarla.

La falta de desarrollo personal o de crecimiento dentro de lo que se hace también puede llevar a la fatiga. Las personas necesitan sentirse desafiadas para seguir motivadas. Si el trabajo o la actividad se vuelve repetitiva y no ofrece oportunidades de aprendizaje o mejora, la persona puede sentirse atrapada en una rutina sin sentido.

El estancamiento en el desarrollo personal es una de las principales razones por las que las personas se cansan de lo que hacen. La falta de nuevos retos, la monotonía y la sensación de no avanzar pueden generar una gran frustración.

En este contexto, el cansancio no tiene que ver con una falta de esfuerzo o con vagancia, sino con la sensación de no estar evolucionando ni creciendo en lo que se hace. El cansancio también puede estar relacionado con una desconexión entre las metas personales y las metas laborales o externas.

Cuando la tarea se convierte en carga

Cuando las personas no ven cómo lo que hacen se alinea con sus propios valores, sueños o ambiciones, la tarea en cuestión pierde su sentido y se convierte en una carga. Esto puede ocurrir cuando una persona trabaja en algo que no tiene nada que ver con sus intereses o cuando se ve forzada a hacer algo que no responde a sus objetivos personales.

En estos casos, el cansancio proviene de la falta de conexión entre la persona y la actividad. La tarea en cuestión no refleja lo que la persona realmente desea hacer, lo que hace que el proceso se vuelva agotador y desmotivante.

Además, el cansancio puede ser un síntoma de problemas de salud mental, como el estrés, la ansiedad o la depresión. Las personas que atraviesan dificultades emocionales pueden experimentar un agotamiento profundo, incluso cuando están realizando actividades que normalmente les gustarían.

El estrés crónico y la ansiedad pueden hacer que incluso las tareas más simples se conviertan en un desafío abrumador, y la depresión puede drenar la energía necesaria para llevar a cabo cualquier actividad.

En estos casos, el cansancio no tiene nada que ver con la falta de motivación o interés, sino con una alteración en el bienestar emocional y psicológico de la persona. Por último, la falta de control sobre lo que se hace puede ser un factor importante.

Cuando una persona no tiene libertad para decidir cómo hacer las cosas, cuándo hacerlas o qué hacer, se puede sentir atrapada en un sistema que no le permite ser dueña de sus acciones. Esta falta de autonomía puede generar un agotamiento profundo, ya que la persona no puede gestionar su tiempo ni sus esfuerzos de acuerdo con sus propias necesidades.

En conclusión

Cuando una persona se cansa de lo que hace, no necesariamente se trata de vagancia o mediocridad. El agotamiento puede surgir por una serie de razones, como la falta de pasión, el sobrecargamiento de responsabilidades, la falta de reconocimiento, la falta de desarrollo personal o la desconexión con los objetivos personales.

El cansancio también puede estar relacionado con la salud mental y el estrés, o con la falta de control sobre la actividad realizada. Reconocer las causas subyacentes del cansancio es crucial para poder abordar el problema de manera efectiva y encontrar formas de recuperar la motivación y el equilibrio.

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