El éxito de cuando todos ganamos

Solo para inteligentes ¡Califica!

El éxito de cuando todos ganamos es fenomenal, siempre y cuando se juegue muy bien los papeles que corresponde exactamente al vendedor. El vendedor común, lo único que piensa es en vender, para él, el cliente significa dólares y hará cualquier cosa con tal de vender.

Con esto no necesariamente tiene que ser un vendedor directo, o sea persona a persona. En el grupo también entran todo lo que tiene que ver con ventas on-line, que ofrecen todo lo que supuestamente el visitante necesita.

El-éxito-de-cuando-todos-ganamosMuchas de las veces no dan lo que ofrecen, eso es no saber conjugar el ganar/ganar, esto no es complicado, es más yo diría que es muy simple porque todo es cuestión de darse cuenta de cómo funciona.

Primeramente ganar, que en este caso sería yo gano, porque  yo recibí un dinero por una venta,  llámese e-book, servicio o un curso de lo que sea, el cual no es tan fácil el lograrlo porque toma su tiempo.

Ahora, claro que no vino por arte de magia porque usted hizo la labor de venta, que todos los que estamos en esta línea sabemos lo tedioso que es, por lo tanto, el dinero es bien ganado.

Ahora viene en segunda que es de nuevo ganar, sólo que en este caso es la contra parte, o sea, el comprador. Todos y nadie se escapa de que han comprado algo en su vida, por lo tanto ¿Qué es lo que espera un comprador?

Espera lo mejor y más que todo que le sirva lo que ha comprado, porque nadie compra por el simple hecho de hacerlo sin ningún sentido. En este caso, la venta se la realiza desde el primer momento en que el futuro comprador la ve.

Al menos la mayor parte que son visuales lo hacen, aunque también lo hacen por medio de la recomendación que en este caso son auditivos. Ahora, cuando el comprador adquirió el producto es porque él vio o escuchó que le va a quedar o a funcionar bien, si no, no hace la compra.

Por lo tanto, el comprador quedó satisfecho y eso significa que él también ha ganado, entonces se ha conjugado bien el ganar/ganar y sólo en esos momentos, se puede hablar de éxito.

Éxito no porque recibió el dinero y el cliente quedó satisfecho, si no porque el cliente hizo una segunda compra y todo porque confía en lo que le van a vender, en que  si le va a funcionar.

Eso se llama garantía segura que es la meta de el éxito de cuando todos ganamos. Hay casos de personas que si compran porque les dio la gana, simple impulso dado por su ego, pero eso ya es otra cosa ya que ahí no importa si le sirve o no, muchos ni se dan cuenta.

Datos

4 comentarios en «El éxito de cuando todos ganamos»

  1. Hola,
    Eso es a nivel de productos.
    Pero que sucede a nivel de personas donde el producto es la persona como empleado ? Respuesta:Si.
    Ahora bien, si hablamos de servicios otorgados supongo que es lo mismo.
    En todos los casos, me he encontrado con el mismo factor común:
    1) La gente trata de bajar y bajar el precio, si no, se enoja, y no lo compra.
    2) Como empleado, siempre me bajaron el precio y como no había otra pega, tuve que aceptar, o si no, hay 100 esperando en la fila.
    3) Como empresa, lo mismo, Ud. cobra caro Sr. siendo que estaba con precios justos.
    Se puede entonces hablar de un ganar/ganar con resultado de éxito ?
    o Es mera ilusión ?
    Porque mucho puede decirse en teoría pero si en la practica eso no se cumple…?
    El factor común … es … en los 3 casos el mismo … y he visto y escuchado que no soy solo el único que le sucede eso.

    1. Hola, eso solo pasa cuando no eres ni pareces alguien seguro de lo que haces, que en este caso al dar a notar tu necesidad, la gente sabe que por eso tu debes someterte a los caprichos del cliente. Ahora, lo mismo pasa cuando eres empleado que si tienes mucha necesidad, eso lo reflejas en tu cara por el miedo que demuestras, cuando hablas, te paras e incluso hasta para sentarte. ¿Con empresas? Es lo mismo todo se basa en el temor a perder.

      Gracias por el comentario.

      1. Hola Roberto:
        Bien, de alguna manera apliqué lo que indicas y lo que hemos hablado en ciertos procesos personales.
        Una vez que le dije ( y sentía yo dentro de mí) de que me hiba a ir, a la persona con quien trabajaba, sólo en ese momento reaccionó, llegando a un acuerdo.
        En este caso se accionó el miedo a perder en el, pero sólo cuando yo le dije mis condiciones que tenía claras como para seguir trabajando juntos o no.
        Luego, incluso frente a ese acuerdo, trató de incluir servicios que no estaban en el acuerdo ( vulgarmente dicho: lo quiso meter todo dentro del mismo saco), pero le dije que no correspondía, así que allí el tiene la opción, o lo toma con otra persona o me dice que realice ese servicio.
        Ahora bien, cuando termina esto ? Al parecer en la medida que a el le vaya quedando claro y se convenza de que yo tengo las cosas claras y no puede abusar, pero sólo si yo me mantengo en una posición clara de lo que permito o no permito.

        1. Así es Augusto, lo que has escrito está bien, ya que nadie da el paso si es que tu no le das el permiso. Es norma general y bien vista que se debe aclarar todo desde un comienzo y para ellos se debe poner la persona en el puesto del cliente, ¿Qué espera, que ganaría, que puede conseguir por una cosa? Así tu mismo puedes dar la respuesta.

          Gracias por el comentario
          Roberto Sanahuano
          Máster en P.N.L.

Responder a Augusto Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.