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La ignorancia es cómoda y oscura. Una forma de estancarse y no poder romper el miedo al éxito es apegarse a la ignorancia. Está comprobado que la ignorancia es cómoda y oscura por ser la parte que menos trabajo da a la mente que aprendió a ser vaga.
Así como aprendió a vestirse, caminar, hablar y todo lo que le sea necesario para vivir, pues así mismo aprendió a ser vago. Ahora ¿En qué parte entra la ignorancia en la vagancia? En el momento que usted o cualquier persona no le ve interés.
Así como vio que era necesario aprender a vestirse, pues nada en el mundo le hará cambiar de opinión, sencillamente porque no le ve necesario el leer o aprender algo que le pueda servir, por lo tanto su vagancia le lleva a la ignorancia.
Con mucha más razón si es cómoda, por eso es que hay tanto desocupado en un país en el que la riqueza está a flor de piel. Es fácil darse cuenta de cómo vienen extranjeros a este país y logran hacer dinero y no solo eso sino que lo mantienen que es lo más difícil.
La ignorancia es cómoda y oscura
Hay que tomar en cuenta que la ignorancia no sólo está en los vagos aunque es la mayoría. La ignorancia también está en la gente que en apariencia tienen sus conocimientos pero sólo a su medida, es decir, que sólo para poder subsistir.
Es palpable el grado que tienen de desconocimientos cuando alguien les toca un tema al que ellos nunca lo han tenido, o si lo escucharon no le dieron importancia por algunas razones. Ese tipo de personas piensan que en lo que ellos están es lo mejor y por lo tanto, no puede haber otra cosa que le supere pero lleva el caso, que están metido en un círculo vicioso y como se acostumbran al medio o se adaptan, se sienten «Felices».
Ahora que pasa cuando algo les molesta por lo cual es evidente que algo hay, entonces dan cualquier explicación que por demás ilógica no lo entienden ni el que dice ni el que escucha. Después de una explicación les echan la culpa a cualquier cosa o persona menos a ellos mismos.
Por lo general siempre tienen la solución a sus males que incluso le da mayor responsabilidad al tiempo, sin darse cuenta que el tiempo no cura nada. El tiempo lo que hace es dejar una cicatriz muy notoria que cada vez que la vea se va acordar de lo que le pasó. Cada vez tienen los mismos problemas con la diferencia que cada vez saben qué hacer y eso es maquillar el problema.
Así dejar al pobre Cronos que se haga cargo de sus males. Todo por apegarse a la ignorancia la cual es madre de muchos males. En el mundo la gente que siempre quiere gobernar sabe que la mejor arma que ellos pueden tener, es la ignorancia.
Para los que no creen, ser ignorante es un requisito para poder ser fanático, en pocas palabras van de la mano por eso es que en las tres cosas por las cuales son dominados la mayor parte del mundo es; El fútbol, política y la religión.
La ignorancia es fácil de manejar
Para las tres cosas entran las masas, que a mayor ignorancia más fácil es para ser manejadas. En los países poderosos en especial en el norte de América hay políticos que quieren eliminar el Internet. Ahora, ¿Las razones? Son simples, el Internet es un medio de comunicación masiva y por ese medio la gente que si quiere aprender buscan la información ahí, por lo tanto la ignorancia está disminuyendo y eso no les conviene a los políticos.
El fútbol y la religión es igual, si usted se pone a pensar ¿Por qué y para qué? De todo lo que le dicen, se va a dar cuenta que no es como usted lo ve. Ahora en la religión, ¿Creen que no le van a llamar la atención por las preguntas que hacen?
Incluso le pueden hacer que usted sienta miedo de lo que pregunta porque nadie cuestiona los designios de Dios, así de simple ahora ¿Por qué lo digo? Pues ya pasé por eso y en algunas Iglesias y todas son lo mismo, por esa razón no pertenezco a ninguna y más porque sé que la ignorancia es cómoda y oscura prefiero aprender de todo.
¿La ignorancia es privilegio para muchos pero un castigo para pocos?
La ignorancia es un concepto complejo que puede interpretarse de maneras diferentes según el contexto y las circunstancias de cada individuo. Para algunos, puede ser un refugio cómodo, un lugar donde las preguntas difíciles no necesitan respuestas, donde la realidad puede mantenerse simple y sin confrontaciones.
En este sentido, la ignorancia puede parecer un privilegio. Sin embargo, para otros, la falta de conocimiento puede ser una barrera infranqueable que limita sus oportunidades, su crecimiento y su capacidad para mejorar su calidad de vida, convirtiéndose así en un castigo. ¿Qué es lo que lleva a esta diferencia?
La respuesta radica en las motivaciones y circunstancias que impulsan a las personas a buscar o evitar el aprendizaje. Las razones por las que una persona decide aprender más que otra son tan variadas como las personas mismas.
Algunas personas están impulsadas por una curiosidad innata, una chispa interna que las lleva a explorar, descubrir y comprender. Para estas personas, aprender no es un medio para un fin, sino un fin en sí mismo. Encuentran satisfacción en el simple acto de conocer algo nuevo, de desentrañar los misterios del mundo y de expandir los límites de su comprensión.
Para ellos, el aprendizaje es una forma de conectar con el mundo, de enriquecer su experiencia y de darle sentido a su vida. En otros casos, el deseo de aprender puede estar motivado por el ego. Una persona puede buscar conocimiento para destacar, para diferenciarse de los demás o para ejercer poder sobre otros.
El aprendizaje, en este contexto, se convierte en una herramienta de estatus y no necesariamente en una búsqueda genuina de entendimiento. El ego puede ser un motor poderoso, pero también puede limitar el verdadero potencial del aprendizaje, ya que la meta se centra en la percepción externa que en el crecimiento interno.
El aprendizaje y su entorno
El entorno juega un papel importante en cómo una persona percibe el aprendizaje. Las experiencias tempranas, la educación y el acceso a recursos influyen significativamente en la actitud hacia el conocimiento. Alguien que ha crecido en un ambiente donde el aprendizaje es valorado y fomentado probablemente desarrollará un interés natural en explorar y crecer intelectualmente.
Por el contrario, aquellos que han sido desalentados o que no han tenido acceso a oportunidades educativas pueden percibir el aprendizaje como algo ajeno o inalcanzable. Esto no significa que carezcan de capacidad o interés, sino que las circunstancias han moldeado sus perspectivas y prioridades.
El aprendizaje también está profundamente ligado a la percepción del futuro. Quienes ven el aprendizaje como un camino hacia un mañana mejor, más rico en posibilidades, suelen estar más dispuestos a invertir tiempo y esfuerzo en adquirir conocimiento.
Sin embargo, quienes viven en circunstancias de supervivencia inmediata, donde las necesidades básicas no están cubiertas, pueden no tener el lujo de dedicar tiempo al aprendizaje. Para estas personas, la ignorancia no es una elección, sino una consecuencia de su situación.
Esto resalta cómo la ignorancia puede ser un privilegio para algunos que eligen permanecer en ella, pero un castigo para quienes no tienen la opción de escapar de ella. La motivación para aprender también puede surgir de experiencias personales significativas.
Un evento transformador, como una enfermedad, una pérdida o un logro, puede despertar un deseo profundo de entender más sobre uno mismo, sobre los demás o sobre el mundo. Este tipo de aprendizaje suele estar cargado de propósito, ya que se basa en la necesidad de encontrar respuestas a preguntas fundamentales.
La ignorar el conocimiento y el confort
Por otro lado, hay personas que no buscan aprender porque están satisfechas con lo que saben. Para ellas, la ignorancia no es una falta, sino un estado de confort. No sienten la necesidad de cuestionar o explorar más allá de lo que ya conocen, y esto puede deberse tanto a la seguridad en su posición actual como al temor de enfrentarse a verdades incómodas.
En este sentido, la ignorancia puede actuar como un escudo protector, manteniéndolas alejadas de la incertidumbre y el cambio. El aprendizaje, en su esencia más pura, es un acto de humildad. Implica reconocer que no se sabe todo, que siempre hay algo nuevo que descubrir y que la búsqueda del conocimiento es interminable.
Aquellos que se sumergen en el aprendizaje con este espíritu suelen encontrar alegría y satisfacción, independientemente de los resultados externos. Para ellos, aprender es una forma de vida, una práctica diaria que los conecta con algo más grande que ellos mismos.
No se puede ignorar el impacto que tiene la sociedad en las actitudes hacia el aprendizaje. En algunos contextos, el conocimiento se valora y se recompensa, mientras que en otros puede ser visto con desdén o sospecha. Esto puede crear un sistema en el que la ignorancia se perpetúa, no por elección individual, sino por normas culturales y sociales que desalientan la curiosidad y el cuestionamiento.
Finalmente, es importante recordar que el aprendizaje no siempre tiene que ser un proceso formal o estructurado. Muchas veces, las lecciones más profundas y significativas provienen de la vida cotidiana, de las interacciones con otras personas y de la reflexión personal. Cada experiencia, por pequeña que parezca, tiene el potencial de enseñarnos algo valioso si estamos dispuestos a escuchar y observar con atención.
En resumen
El deseo de aprender es un fenómeno multifacético influido por factores internos y externos. Mientras algunos encuentran en la ignorancia un refugio cómodo, otros la ven como una barrera que necesitan superar. Las motivaciones para aprender pueden surgir del ego, de la curiosidad, de las circunstancias o de experiencias significativas.
Lo que realmente importa no es por qué aprendemos, sino que nunca dejemos de hacerlo. El aprendizaje es lo que nos permite crecer, adaptarnos y, en última instancia, darle un propósito más profundo a nuestras vidas.
Roberto,
Cómo podemos diferenciar si nuestro miedo al éxito sea realmente la ignorancia (falta de conocimientos) o conocimientos erróneos o traumas ?
O sea, estoy planteando que el origen de ese miedo sea uno de esos 3: ignorancia, conocimientos erróneos, traumas.
Por ignorancia me refiero a que desconoces de algo ( falta de conocimiento).
Por conocimientos erróneos me refiero a que aprendiste algo pero mal aprendido.
Por Trauma que por alguna razón estés bloqueado en algo que te impida alcanzar un objetivo.
Ahora bien, respecto a aprender de todo, no se supone que la especialización es cada vez más grande ? antes yo quería aprender de todo pero cada vez más me veo imposibilitado de ello, porque no me interesa porque me consume tiempo y no tendré una aplicación de eso, o que no me es rentable y sería como darse un lujo. Y no se trata de comodidad.
Quién aprende cosas hoy en día por solo aprender con a esperanza de que algún día lo utilizarás ? Nadie. Tendría que disponer de mucho dinero.
Gracias.
Hola Augusto, a lo que te refieres es a la cultura general que sirve en cualquier ocasión, pero si quieres indagar por solo gusto por conocer, eso no te llevará a ningún lado, ¿Por qué? Por el hecho que ese tiempo lo puedes usar para aprender solo lo que te compete para tu desarrollo, sea como empleado o empresario. Por otro lado, el conocimiento en mi caso no he avanzado por el hecho que parte de mi especialización (según ellos) cuesta más de 6.000 dólares pero como en mi caso que he aprendido por lectura avanzada y practicas, sin pensar he avanzado en esas especializaciones sin tener que pagar un centavo pero con la diferencia que no tengo un cartón que diga que fulano de tal, es especialista en «Estructura de la ingeniería humana» algo que lo hago hace algunos años, por eso, solo en mi caso si es dable que siga haciendo uso del conocimiento pero si no estuviera en esto, solo sería un lujo, como en tu caso. Una vez te dije que la esperanza solo es el anhelo de los tontos, TE SIRVE O NO, así de simple. Después de todo esto, el miedo es lo que hace que aprendas algo a medias o simplemente no lo haces por el temor a que no te sirva.
Gracias por el comentario
Roberto Sanahuano
Programador Neuro-Lingüista
Terapias Cambios personales