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La afirmación de tu potencial es ilimitado, está basado en una realidad aunque para muchos no sea así, en esto tiene mucho que ver los medios, que se encargan de decirnos que todo lo que tenemos que hacer, aunque no lo debemos hacer, ¿De qué forma? Pues cuando nos dicen que tenemos un jardín muy bonito, pero el fin de ello es para que tú duermas hasta que te hagas polvo.
Cuando te dicen que tienes que comprar un seguro de vida, porque sí no lo compras te puede ir mal, cuando te dicen que debes cuidarte de las enfermedades, porque te puedes morir pero para evitar esto, está cierto servicio médico que te puede ayudar para esos eventos. Cuando te dicen que tú no puedes hacer algo, si es que no acudes a alguien para que te lo haga, en total te convierten en un inepto.
La lista es inmensa haciéndote creer, que tú necesitas de todo porque tú no puedes, aunque podría aceptarlo en el caso que mis obligaciones, no me dieran tiempo y por la necesidad recurriría a otra persona o servicio. Tu potencial es ilimitado porque tu cerebro, tiene suficiente capacidad y nosotros apenas ocupamos una mínima parte.
Lo que ignoras de ti mismo
Ahora si se preguntan, ¿Qué tiene que ver un cementerio, prevenirte contra la muerte en forma de un ¿Seguro? Incluso un servicio médico? Cómo dije la lista es inmensa. El caso es que te meten el miedo de la muerte, cuando la misma está al servicio de cualquiera y no por eso, sino que todo depende de que manera tienes para vivir, es decir, si vives sumido en el miedo, desde luego que te puede pasar algo.
En pocas palabras, te dicen categóricamente que tú estás indefenso por lo tanto, necesitas de ellos para poder vivir. ¿Se acuerdan del H1N1? Pues en el tiempo que el gobierno norteamericano quiso causar un pandemónium, más unido a la ignorancia de las personas, casi contamina a todo el mundo con algo que ni siquiera era posible.
Solo para que se informen, todo cuerpo es una máquina perfecta, que tiene todo lo necesario para que su función sea óptima, ¿Quién la dirige? Pues el cerebro que con su comandante en jefe, que es la mente logra que todo esté bien. Ahora, ¿Por qué un cuerpo se enferma? Pues lo hace porque su mente se distrae en problemas emocionales, ocasionado por alguna experiencia que le tocó vivir.
¿Cómo te ayuda el dejar de temer?
La única forma de que el H1N1 llegara a enfermar un cuerpo era de esa manera, ¿Cómo? Pues asustándonos como pasó en México, incluso hubo mucha gente hospitalizada. Aquí en Ecuador cómo que quiso causar algo parecido, incluso en mi barrio la gente ya estaban usando las dichosas mascarillas, claro que era uno que otro pero igual.
En mi caso, me reía de ver a los incautos y por eso me preguntaron ¿Cuándo me compraba mi mascarilla? Todos creían en eso menos yo, ahora ¿Creen que yo iba a comprar algo que sabía que era inútil?
Al menos no estaba asustado por lo tanto no pasó nada. Tu potencial es ilimitado porque fue diseñado así, solo que mucha gente con sus intereses creados por el dinero, nos quieren meter por los ojos que no es así.
Tú puedes hacer todo lo que te propongas, solo es cuestión que lo mires pero nunca con duda de, ¿Quién me podrá ayudar? ¡Jamás! Porque esto es igual a cuando un perro se cruza por tu camino y tú le tienes miedo, ten por seguro que hasta el perro más miedoso te va a morder, ¿Por qué? Pues porque tú se lo has pedido.
¿Cómo se genera el miedo?
El miedo se genera como una respuesta natural del cerebro ante una amenaza real o percibida. Es un mecanismo de defensa que ha evolucionado para protegernos de peligros potenciales. Este proceso ocurre en varias etapas.
Cuando los sentidos detectan algo que el cerebro interpreta como peligroso (un sonido fuerte, una situación incierta, etc.), el sistema nervioso se activa. Esta pequeña estructura en el cerebro procesa las emociones, especialmente el miedo.
Una vez que percibe la amenaza, envía señales al cuerpo para prepararse. El cerebro activa la liberación de hormonas como la adrenalina y el cortisol, lo que provoca una respuesta física: aumento del ritmo cardíaco, tensión muscular y estado de alerta.
Mientras el cuerpo reacciona, la mente evalúa la amenaza de manera más racional. Si se concluye que el peligro es real, el miedo persiste; si no, la sensación disminuye. El miedo, aunque incómodo, es una herramienta esencial para la supervivencia.
Sin embargo, cuando se activa de manera excesiva o irracional, puede convertirse en una fuente de ansiedad o estrés. Los resultados mas claro son enfermedades emocionales o física, que hace que la persona pierda libertad de acción.
Los resultados del miedo
Ahora, ¿De qué forma se puede pedir a un perro que te muerda? Pues con el miedo, el perro huele el miedo y por tal sabe que tú eres presa fácil. Lo mismo pasa con los delincuentes, ellos te roban porque sienten tu miedo, es como un radar que se activa cuando sabes que llevas algo que te pueden robar.
En mi caso y las personas que me conocen saben que no miento, porque en mi haber hay muchas cosas que he logrado y sin saber nada al respecto, ¿Cómo se logra llegar a tu potencial ilimitado? Pues empezando que cuando tengas algo que no sepas hacer, primero lo debes consultar, al menos ahora que está el Internet es más fácil.
Cuando tú decides hacer algo, en tu mente se activa algo que hace que tu mente, se abra y la información empieza a llegar, claro que hay que tener cuidado porque nadie, es un prodigio de la noche a la mañana, al menos yo no lo he sido porque he tenido que aprender algunas cosas, y cuando tu mente se habitúa a estar aprendiendo, todo se hace más fácil.
Tu potencial es ilimitado aunque no lo creas y te puede ahorrar muchos dólares. En esto no se trata que te rayes de tacaño o afrentoso, sino que seas muy capaz de cualquier cosa, así mismo como eres capaz de perder el tiempo en jodiendas, también eres capaz de crear una solución en cualquier momento de tu vida. Tomen mucha atención porque solo ustedes tienen el poder de seguir adelante, ya que tu potencial es ilimitado.
¿En qué consiste la evaluación del miedo?
La evaluación del miedo es el proceso por el cual el cerebro y el cuerpo interpretan y responden a una amenaza percibida, determinando si el peligro es real, inminente o imaginario.
Este proceso involucra tanto respuestas automáticas e instintivas como reflexiones conscientes y racionales. Comprender en qué consiste la evaluación del miedo es clave para entender cómo funciona esta emoción, y cómo puede ser manejada o, en algunos casos, malinterpretada por el individuo.
El primer paso en la evaluación del miedo es la percepción de la amenaza. Los estímulos externos, como un ruido fuerte o la presencia de una situación peligrosa, son detectados a través de los sentidos: vista, oído, olfato, tacto y gusto.
Estos estímulos son enviados al cerebro, específicamente al tálamo, que actúa como una estación de retransmisión, enviando la información tanto a la amígdala (para una respuesta emocional rápida) como a la corteza prefrontal (para una evaluación más consciente y racional).
La amígdala, una estructura en el cerebro involucrada en el procesamiento emocional, es fundamental en la respuesta de miedo. Ante un estímulo que podría representar peligro, la amígdala responde de inmediato, incluso antes de que la corteza prefrontal haya procesado racionalmente si el estímulo es realmente peligroso o no.
Esta rapidez en la respuesta es esencial para situaciones de amenaza inmediata, donde el tiempo es crítico para la supervivencia. Cuando la amígdala detecta una amenaza, se desencadena lo que se conoce como la respuesta de lucha o huida.
Este es un mecanismo evolutivo diseñado para preparar al cuerpo ante situaciones de peligro. La amígdala envía señales al hipotálamo, que a su vez activa el sistema nervioso simpático. Esto resulta en la liberación de hormonas como adrenalina y cortisol, que preparan al cuerpo para enfrentarse al peligro (luchar) o escapar (huir).
Evaluación consciente del miedo
Los efectos físicos de esta respuesta incluyen un aumento del ritmo cardíaco, respiración acelerada, dilatación de las pupilas y aumento del flujo sanguíneo hacia los músculos, lo que permite una reacción rápida ante la amenaza percibida. Este proceso es muy rápido y ocurre de manera casi automática.
Mientras el cuerpo reacciona de manera instintiva, la corteza prefrontal (responsable del pensamiento racional y la toma de decisiones) está procesando la situación con mayor detalle.
En esta etapa, el cerebro está intentando responder a preguntas clave: «¿Es esta amenaza real o imaginaria?», «¿Es este peligro inminente o lejano?» y «¿Cómo puedo manejar esta situación?»
Si la corteza prefrontal determina que la amenaza no es tan grave como se pensaba inicialmente, puede enviar señales para inhibir la respuesta de lucha o huida, lo que calma al cuerpo y reduce el miedo.
Por ejemplo, si escuchas un ruido fuerte en la noche y tu cuerpo responde de inmediato con miedo, la corteza prefrontal puede, después de unos segundos, evaluar que el ruido fue solo el viento moviendo una ventana, lo que reduce la sensación de amenaza.
Sin embargo, si la evaluación racional confirma que el peligro es real (como ver un coche que se acerca a gran velocidad), el miedo se mantiene o incluso aumenta, permitiendo que el cuerpo continúe con la respuesta de lucha o huida.
Factores que influyen en la evaluación del miedo
La evaluación del miedo no es un proceso uniforme, y diferentes factores pueden influir en cómo una persona evalúa y reacciona ante el miedo. Las personas que han experimentado situaciones traumáticas o peligrosas en el pasado pueden ser más propensas a reaccionar con miedo ante estímulos similares, incluso si no son una amenaza real en el presente.
El entorno en el que ocurre la amenaza puede afectar la evaluación. Un ruido fuerte en medio de una fiesta probablemente se evalúe de manera diferente a uno en una calle desierta por la noche.
Si una persona ya está en un estado de ansiedad o estrés elevado, es más probable que perciba una amenaza como más grave de lo que realmente es. Las emociones pueden amplificar la percepción del peligro.
Las creencias y pensamientos personales también juegan un papel importante. Una persona que tiene miedo de volar en aviones, por ejemplo, puede evaluar una turbulencia menor como una señal de peligro inminente, incluso cuando no lo es.
El miedo es útil cuando está basado en una evaluación correcta de la amenaza, pero puede volverse problemático si es irracional o está desproporcionado con respecto a la realidad.
El miedo irracional, como las fobias, ocurre cuando la respuesta de miedo es activada en ausencia de un verdadero peligro, lo que puede causar ansiedad crónica y evitar que la persona lleve una vida normal.
En estos casos, la evaluación consciente del miedo juega un papel crucial para desactivar estas respuestas irracionales. Técnicas como P.N.L. pueden ayudar a las personas a reentrenar sus mentes para evaluar el miedo de manera más precisa y desarrollar respuestas más saludables ante situaciones que no presentan un peligro real.