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Un triunfo de una derrota. Aquel que se levanta de las cenizas es porque ha sacado un triunfo de una derrota. Me parece muy bueno que las personas estén bien convencidas, de que no hay nada en el mundo más fuerte que el deseo de superarse. Cuanta gente hay por ahí que han tenido problemas que se les ha hecho tan grande, que creen ser muy pequeños para resolverlos.
Ellos no pueden manejarlos por la sencilla razón de que ellos mismo les dieron permiso como para que se queden en su mente. No existe el problema grande lo que existe es mente estrecha y de eso hay de distintos tamaños para pequeño, es decir, chico, más chico, diminuto y de paso atrofiado.
Ahora, ¿Piensa que es una obra de la mala suerte el que alguien por ahí esté pasando por una tragedia? No y eso jamás será así porque el impedimento lo formamos nosotros. Si y es verdad que hay momentos en que uno se siente de lo más desgraciado y perdido del mundo, con ganas a veces hasta de suicidarse pero.
Sentirse mal no es opción
Eso es porque así formamos el mundo en que nosotros decidimos vivir, sintiéndonos el ser más pequeño de la tierra sin siquiera ver que hay muchas oportunidades, en la que siempre están en nuestras narices y por el simple hecho de querer sentirnos mal es que no la vemos. ¿Acaso piensa que usted es el único en el mundo que se siente mal?
Lo dudo mucho, ¿Piensa que no hay nadie en la tierra que esté en circunstancias aun peores, porque sólo usted es elegido para sufrir? Ni siquiera se atreva a pensar así, porque ese no es su estilo. Aunque dude de que sea una realidad pero usted tiene la solución, lo que pasa es que usted no se decide a querer verla.
En el momento en que usted decide cambiar su historia, ya ha empezado su triunfo porque sacar un triunfo de una derrota es más glorioso, mucho más cuando ha estado en situaciones desesperantes que la única solución que veía es el suicidio. ¿Cómo puede saber que usted está en el camino correcto?
Es simple, usted sabrá que está en el camino correcto cuando su mente empiece a buscar ayuda, usted se dará cuenta porque ya sabe que está mal todo a su alrededor por lo tanto, su mente será su guía sólo déjese llevar por la intuición pero, no se confunda porque si usted consulta con una persona que ha tenido problemas.
El más indicado para consultas
Y esa persona no pudo resolver su problema sea de cualquier forma, ¿Entonces para qué consulta con el menos indicado? Lo único que puede sacar de ahí es saber las mil y una forma de cómo no poder resolver algo, usted se dará cuenta con las primeras frases de respuesta de aquella persona, y mucho más si su cara lo delata.
Por experiencia personal les digo que si usted se ubica en querer resolver algo, siempre encontrará un excelente resultado, ahora depende mucho de que tan interesado o convencido está de que si lo puede encontrar, en mi caso he resuelto problemas que en otras épocas pensé que jamás podría pero lo hice.
Sacar un triunfo de una derrota es lo más increíble que puede hacer una persona y sé, que hay muchos por ahí que lo han logrado ¡FELICITACIONES! Para todas aquellas personas que si encontraron el camino más adecuado.
Nadie está perdido, el que está perdido es el camino pero con su valentía, coraje, determinación y más que todo el deseo de ser alguien diferente de los demás, que encuentra la dirección del camino perdido y hace un triunfo de una derrota.
¿Por qué algunas personas eligen sentirse mal?
Es común escuchar que algunas personas parecen estar atrapadas en un ciclo de pesimismo, tragedia y mala suerte. Esta percepción puede ser desconcertante, especialmente para quienes se esfuerzan por mantener una mentalidad positiva y optimista.
Sin embargo, la pregunta que surge es: ¿Por qué algunas personas parecen disfrutar de sentirse mal o aferrarse a una visión negativa de la vida? Este fenómeno puede ser complicado y multifacético, y a menudo está arraigado en una combinación de factores psicológicos, emocionales y sociales.
En este artículo, exploraremos las razones detrás de este comportamiento, así como las posibilidades de romper con ese ciclo negativo. La historia de vida de una persona juega un papel crucial en su forma de ver el mundo.
Aquellos que han experimentado traumas, pérdidas o dificultades en la infancia pueden desarrollar una visión pesimista como mecanismo de defensa. Al anticipar lo peor, estas personas sienten que están preparándose para el dolor, lo que les brinda una falsa sensación de control sobre sus vidas.
Este patrón puede convertirse en un ciclo vicioso. Las experiencias negativas pueden llevar a la desesperanza, y a su vez, la desesperanza puede hacer que las personas se sientan incapaces de cambiar su situación, perpetuando así su estado emocional.
Las personas con las que nos rodeamos tienen un impacto significativo en nuestra perspectiva. Si alguien se encuentra en un entorno donde el pesimismo es la norma, es probable que adopte ese mismo enfoque.
Los grupos de apoyo, por ejemplo, pueden ofrecer validación y empatía, pero en algunos casos, también pueden reforzar una mentalidad negativa. Además, la cultura también juega un papel importante.
La búsqueda de atención y validación
En sociedades donde la tragedia y el sufrimiento se glorifican, puede haber una tendencia a buscar una identidad en el dolor. Esto puede manifestarse en la música, el arte y la literatura, creando un ciclo en el que las personas se sienten atraídas por la tragedia como una forma de autoexpresión.
Para algunas personas, sentirse mal puede ser una forma de atraer atención y empatía de los demás. Este comportamiento puede ser inconsciente, pero es posible que estas personas sientan que al expresar su sufrimiento, obtienen reconocimiento y apoyo de su entorno.
En este sentido, la tragedia puede convertirse en una forma de comunicación. Este deseo de validación puede estar ligado a una baja autoestima. Aquellos que no se sienten valorados pueden recurrir al pesimismo como una manera de crear un sentido de importancia en su vida.
Al compartir sus luchas, sienten que están conectando con los demás, aunque de una manera negativa. Una vez que una persona se encuentra atrapada en un ciclo de pesimismo, puede ser difícil salir.
La mente se concentra en lo malo, lo que refuerza la creencia de que las cosas nunca mejorarán. La desesperanza puede llevar a acciones que perpetúan el sufrimiento, como el aislamiento social, la falta de autocuidado y decisiones poco saludables.
A medida que la persona continúa sintiéndose mal, su perspectiva se vuelve más negativa, y su capacidad para ver oportunidades o soluciones se limita. Romper este ciclo requiere un esfuerzo consciente y a menudo un cambio de mentalidad.
¿Existen Caminos para Evitar el Pesimismo?
Si bien puede ser difícil evitar entrar en el mundo del pesimismo, existen estrategias y enfoques que pueden ayudar a las personas a mantenerse en el camino del optimismo. El primer paso para evitar el pesimismo es reconocer los propios patrones de pensamiento.
La autoconciencia permite a las personas identificar cuándo están cayendo en pensamientos negativos y trabajar activamente para desafiarlos. Practicar la atención plena (mindfulness) puede ser una herramienta efectiva para cultivar la conciencia del momento presente y desarrollar una perspectiva más equilibrada.
La calidad de nuestras relaciones sociales impacta en nuestra forma de ver la vida. Mantener relaciones con personas que tienen una perspectiva positiva puede ayudar a contrarrestar los pensamientos pesimistas.
Estas personas pueden actuar como un soporte emocional, ofreciendo una nueva perspectiva y recordándonos las cosas buenas de la vida. La gratitud es una poderosa herramienta para combatir el pesimismo.
Tomarse un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las que se está agradecido puede ayudar a reorientar la mente hacia lo positivo. Llevar un diario de gratitud puede ser un ejercicio efectivo para cultivar esta práctica.
En algunos casos, la ayuda de un profesional de la salud mental puede ser crucial. Un terapeuta puede ayudar a las personas a explorar las raíces de su pesimismo, enseñándoles técnicas para cambiar su forma de pensar y actuar.
La terapia cognitivo-conductual, por ejemplo, se centra en identificar y modificar patrones de pensamiento negativos, proporcionando herramientas para enfrentar desafíos emocionales.
Conclusión
El pesimismo puede parecer un lugar cómodo para algunos, un refugio que les brinda una forma de afrontar el dolor y la incertidumbre. Sin embargo, aferrarse a una visión negativa de la vida puede ser perjudicial y limitar la capacidad de una persona para disfrutar de momentos positivos y oportunidades.
Si bien hay múltiples factores que contribuyen a la atracción hacia el pesimismo, es posible encontrar caminos que permitan a las personas salir de ese ciclo y adoptar una mentalidad más positiva.
Fomentar la autoconciencia, rodearse de influencias positivas y practicar la gratitud son solo algunas de las estrategias que pueden ayudar a transformar una perspectiva pesimista en una más optimista.
En última instancia, cada individuo tiene el poder de elegir cómo reaccionar ante las circunstancias de la vida. Si bien no siempre será fácil, el camino hacia el optimismo y la satisfacción personal es un viaje que vale la pena emprender.
Buenos dias,
Haciendo varios triunfos de varias derrotas.
Gracias.
Solo se tiene que ser perseverante ya que si fuera fácil y sencillo, cualquier persona lo haría pero, también hay una diferencia entre el que lo quiere hacer y el que se siente forzado hacerlo, esto es que el que quiere hacerlo lo hace fácil y sencillo pero el que no, es difícil, cansado.
Roberto Sanahuano
Programador Neuro-Lingüista
Terapias cambios personales