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Cómo tener una excelente comunicación. El aprendizaje es universal y todo gracias al conocimiento pero, no puede haber conocimiento y peor aprendizaje si no hay comunicación, para que esto se cumpla hay una pregunta, ¿Cómo tener una excelente comunicación? La verdad que comunicarse es un arte por lo tanto hay muchos artistas en el mundo.
En vista que la comunicación es un arte, cada persona que utiliza este medio tiene su forma especial de hacerlo, incluso una misma persona puede tener varias manera de decir las palabras para dar una explicación, a eso se debe que en la red en especial en los blogs hay temas por lo cual se escriben artículos, que en apariencia con uno sólo quedaría explicado dicho tema.
Y eso en la realidad no es así, porque se puede explicar o escribir sobre un tema de muchas maneras, ¿Las razones? Pues porque hay miles de personas que entran en un blog y no todos entienden de la misma forma que entiende usted o yo.

Con esto no es necesario que todos los artículos lleven el mismo título. Hay que cambiarlos porque se necesita de la curiosidad de las personas, que están en búsqueda de información, si encontraran el mismo título perderían el interés.
La información simple
He entrado en blog que hablan por decir de salud y por tal, tienen más de 500 artículos sobre ese tema, como usted sabe y yo creía que con uno o dos artículos es suficiente, como para dar una pequeña explicación de por qué sucede las cosas en el cuerpo.
No es así, porque hay muchas formas de explicar y basta que le quite una palabra, el significado cambia, claro que me refiero a una palabra clave y no cualquiera. Esto sucede igual con las palabras dichas o habladas. Entonces lo que para usted es nítido, claro y conciso para otra persona puede ser muy confuso, aunque lo diga con palabras de a centavo.
Cada persona tiene su propio sistema de entender las cosas, y eso depende mucho de cómo ve su entorno. En esto no tiene que ver el tipo de educación que haya tenido, pues he conocido a Ingenieros, aunque son expertos en su rama, carecen de facilidad de palabra, por lo tanto es un poco complicado pero no imposible conversar con ellos.
Incluso tengo un amigo que para hablar con él hay que buscar la forma de cómo hacer que su comunicación sea lenta, ya que es la única manera de poder entenderlo en un 70% lo que dice, el 30% lo pone el que escucha, es como si fuera un rompecabezas que está a medio hacer, usted lo que tiene que hacer es ubicar las piezas dónde tienen que estar para poder entender lo que dice.
Las pruebas mentales
Me he topado con clientes que me ha sido fácil hablar con ellos pero, también me ha salido verdaderos jeroglíficos que aunque pienso que estoy teniendo una excelente comunicación, resulta que no ha sido así por lo tanto, he tenido que parar y hacer unas pequeñas pruebas mentales de visualizaciones para saber si con una frase, la persona construye la imagen que deseo, que tenga en su mente para que la comunicación sea congruente.
Una vez tuve que tener un intérprete sólo para poder atender a una señora, no porque hable otro idioma, lo que pasa es que ella me entendía a su manera y no era lo que quería que entienda, por eso tenía que decirle a otra persona lo que quería que entienda y ella le decía de una forma casi parecida, que en realidad para mí era lo mismo pero mi comunicación con ella no era eficiente.
Comunicación y confianza
Pienso que una de las razones para que la comunicación sea excelente debe haber la confianza, puede ser que posiblemente y que a pesar que todo estaba saliendo con excelencia, ella no confiaba por el hecho de ser hombre puesto que el mal que tenía en su mente, justamente era ocasionado por hombres (abusos sexuales) por tal su mente se cerraba a medias, la única persona que podía abrir su mente era su compañero.
Lo que aprendí de esto es que antes de comunicarse con alguien ajeno a mí, primero tengo que ganarme la confianza después lo que diga será sólo cuestión de cómo lo diga, al menos claro que todo radica en que clase de resultados quiera tener. Todo resulta más fácil si tiene conocimientos ya que es la única forma de cómo tener una excelente comunicación.
¿Por qué la comunicación se torna problemática?
La comunicación es un proceso esencial para el desarrollo personal y social, ya que permite la transmisión de ideas, emociones e información. Sin embargo, no siempre se lleva a cabo de manera eficaz.
Las barreras en la comunicación pueden provocar malentendidos, conflictos e incluso afectar relaciones personales, laborales o institucionales. Ahora, exploraremos por qué la comunicación se torna problemática y cómo podemos identificar al receptor adecuado para que el mensaje tenga el impacto esperado.
La comunicación implica varios elementos, como el emisor, el mensaje, el canal, el receptor y el contexto. Cuando alguno de estos componentes falla, surgen dificultades que entorpecen la comprensión mutua. Un mensaje ambiguo, vago o mal estructurado tiende a generar confusión.
Si la información no es precisa o está mal expresada, el receptor puede interpretarla de forma incorrecta, lo que crea malentendidos. Ejemplo: En el ámbito laboral, una instrucción poco clara puede llevar a que los empleados realicen tareas equivocadas, lo que afecta la eficiencia.
Solución: Asegúrate de que los mensajes sean concretos, específicos y fáciles de entender, adaptados al contexto del receptor. El “ruido” se refiere a cualquier interferencia que distorsiona el mensaje durante su transmisión. Esto puede ser literal, como un ruido ambiental, o simbólico, como prejuicios, suposiciones o malentendidos culturales.
Ejemplo: Una conversación telefónica con mala conexión puede generar frustración y errores de interpretación. Solución: Escoger el canal adecuado y minimizar distracciones mejora la calidad de la comunicación.
Diferencias culturales y emocionales
La cultura y las emociones influyen en la forma en que las personas interpretan los mensajes. Lo que para una persona puede ser una crítica constructiva, para otra puede resultar ofensivo.
Ejemplo: En un equipo multicultural, ciertos comentarios informales pueden ser mal vistos por algunas personas, lo que provoca tensiones. Solución: Es importante desarrollar sensibilidad cultural y empatía para evitar malentendidos.
La comunicación efectiva no solo depende de hablar, sino también de escuchar. Cuando las personas no prestan atención o interrumpen constantemente, la conversación se vuelve disfuncional.
Ejemplo: En discusiones personales, la falta de escucha puede generar frustración y que las partes sientan que no son valoradas. Solución: Practicar la escucha activa implica prestar atención, hacer preguntas pertinentes y evitar interrumpir al interlocutor.
Las emociones fuertes como el enojo, la ansiedad o el miedo pueden interferir en la comunicación. Asimismo, ciertas creencias limitantes, como “mi opinión no importa”, pueden bloquear la expresión clara de las ideas.
Ejemplo: Una persona que se siente atacada en una discusión puede reaccionar a la defensiva y distorsionar el mensaje que recibe. Solución: Es fundamental aprender a manejar las emociones durante la comunicación para evitar que interfieran negativamente.
¿Cómo saber a quién comunicar?
Transmitir el mensaje a la persona adecuada es tan importante como el contenido mismo. Identificar al receptor correcto maximiza la posibilidad de que la comunicación sea efectiva y que se logren los objetivos deseados. Antes de comunicar algo, es esencial identificar el objetivo del mensaje: ¿Quieres informar, convencer, pedir ayuda, resolver un conflicto o simplemente expresar una emoción?
El propósito te ayudará a definir a quién debes dirigirte. Ejemplo: Si quieres resolver un conflicto en el trabajo, es mejor dirigirse directamente a la persona implicada o a un superior en lugar de discutirlo con compañeros que no están involucrados.
En ciertas situaciones, no basta con transmitir la información, sino que es crucial que llegue a la persona adecuada para que se tomen decisiones o acciones. Ejemplo: Si un empleado detecta un problema técnico, debe reportarlo al equipo de soporte, no al departamento de marketing. Evalúa quién tiene la autoridad, conocimiento o capacidad de resolver o responder al mensaje que quieres comunicar.
La relación entre quien emite el mensaje y quien lo recibe influye en la interpretación de este. La confianza y la empatía facilitan la comunicación abierta, mientras que las relaciones tensas pueden distorsionar los mensajes.
Ejemplo: En conversaciones delicadas, como dar retroalimentación negativa, es importante que exista una relación de confianza para que el mensaje sea bien recibido. Adapta el tono y las palabras según la relación que tengas con el receptor.
Escoger el momento adecuado para comunicar
No solo importa a quién se comunica, sino también cuándo. Transmitir un mensaje en un momento inapropiado puede reducir su efectividad. Ejemplo: Enviar un correo urgente fuera del horario laboral puede ser contraproducente, ya que el receptor podría no verlo a tiempo. Evalúa el contexto y el estado emocional del receptor antes de comunicarte.
No todas las personas manejan el mismo nivel de conocimiento sobre un tema. Un mensaje demasiado técnico puede resultar incomprensible para quien no está familiarizado con el vocabulario especializado. Ejemplo: Al explicar un proceso complejo a un cliente sin conocimientos técnicos, es mejor utilizar analogías y evitar jerga innecesaria. Adapta el mensaje al nivel de comprensión del receptor para que sea claro y accesible.
Conclusión
La comunicación se vuelve problemática por diversas razones, como la falta de claridad, las interferencias, las diferencias culturales y emocionales, o la ausencia de escucha activa. Además, la forma en que las emociones y los prejuicios afectan la comunicación demuestra la importancia de desarrollar habilidades como la empatía y la gestión emocional.
Por otro lado, saber a quién comunicar es fundamental para que el mensaje llegue de manera efectiva. Elegir al receptor adecuado implica tener claro el propósito del mensaje, considerar quién tiene la autoridad para actuar, y adaptar tanto el tono como el contenido a la relación y el contexto.
En un mundo interconectado donde la información circula rápidamente, una comunicación efectiva no es solo una habilidad, sino una necesidad. Al identificar y resolver las barreras que dificultan la comunicación y al transmitir mensajes a las personas indicadas, es posible evitar malentendidos, mejorar las relaciones y alcanzar los objetivos con mayor eficiencia.